¿Cambiarías este Ford T de 1914 por un Chevrolet Corvette nuevo?
Una cliente entrega un Ford T y otros dos coches a cambio de un Chevrolet Corvette C6 nuevo. ¿Ha pecado de ingenua?
Casi todos los concesionarios tienen anécdotas sobre coches que han tenido que aceptar cuando un cliente se compra un modelo nuevo. Pero este caso que ha ocurrido en un concesionario Chevrolet del estado de Louisiana (EE.UU.), es duda una de las más mayores curiosidades que hemos visto últimamente.
Tina Boyter, vecina de Bossier City, se acercó al concesionario oficial Chevrolet Red River porque estaba interesada en u Chevrolet Corvette LT2 blanco que tenían expuesto. Se trataba de un Corvette C6 (el actual a la venta, que será sustituido el año que viene por el Chevrolet Corvette Stingray) Hasta ahí nada extraordinario. Lo único, que quería que el concesionario se quedase con tres de sus coches para ayudar a pagar el Corvette… Nada extraordinario, salvo que uno de ellos se trataba de un Ford T de 1914.
Aunque se trata de un coche clásico y un auténtico icónico, el Modelo T de Ford no es un coche se que se venda caro. Normalmente puedes verlos en webs americanas por precios que rondan los 15.000 y 20.000 dólares… pero es que la unidad que tenía algo especial.
La mayor característica que hace único a este Ford T de 1914 son que fue modificado para carreras por la fábrica. Además durante los años que perteneció al padre de la dueña. el coche había ganado un montón de concursos debido a su gran estado, lo que le da mucho pedigree.
¿Cambiarlo junto con otros dos coches por un Corvette C6, fue una estafa para la compradora? ¿Por que cuánto podría valer un coche así? Posiblemente la mejor opción de venta sería en una subasta. Dese el concesionario indican que lo valoraron en 7.000 dólares y lo vendieron al día siguiente por 10.000, así que, de ser cierto, el gran negociador podría ser un tercero.
Por cierto, los otros dos autos intercambiados por Tyna fueron un Cadillac El Dorado de 1978 y un Corvette de 1980. Sea cual sea el resultado final, la dueña hizo lo que quiso y terminó muy contenta con su nuevo Corvette.
Fuente y Fotos: Red River Chevrolet
Una cliente entrega un Ford T y otros dos coches a cambio de un Chevrolet Corvette C6 nuevo. ¿Ha pecado de ingenua?
Casi todos los concesionarios tienen anécdotas sobre coches que han tenido que aceptar cuando un cliente se compra un modelo nuevo. Pero este caso que ha ocurrido en un concesionario Chevrolet del estado de Louisiana (EE.UU.), es duda una de las más mayores curiosidades que hemos visto últimamente.
Tina Boyter, vecina de Bossier City, se acercó al concesionario oficial Chevrolet Red River porque estaba interesada en u Chevrolet Corvette LT2 blanco que tenían expuesto. Se trataba de un Corvette C6 (el actual a la venta, que será sustituido el año que viene por el Chevrolet Corvette Stingray) Hasta ahí nada extraordinario. Lo único, que quería que el concesionario se quedase con tres de sus coches para ayudar a pagar el Corvette… Nada extraordinario, salvo que uno de ellos se trataba de un Ford T de 1914.
Aunque se trata de un coche clásico y un auténtico icónico, el Modelo T de Ford no es un coche se que se venda caro. Normalmente puedes verlos en webs americanas por precios que rondan los 15.000 y 20.000 dólares… pero es que la unidad que tenía algo especial.
La mayor característica que hace único a este Ford T de 1914 son que fue modificado para carreras por la fábrica. Además durante los años que perteneció al padre de la dueña. el coche había ganado un montón de concursos debido a su gran estado, lo que le da mucho pedigree.
¿Cambiarlo junto con otros dos coches por un Corvette C6, fue una estafa para la compradora? ¿Por que cuánto podría valer un coche así? Posiblemente la mejor opción de venta sería en una subasta. Dese el concesionario indican que lo valoraron en 7.000 dólares y lo vendieron al día siguiente por 10.000, así que, de ser cierto, el gran negociador podría ser un tercero.
Por cierto, los otros dos autos intercambiados por Tyna fueron un Cadillac El Dorado de 1978 y un Corvette de 1980. Sea cual sea el resultado final, la dueña hizo lo que quiso y terminó muy contenta con su nuevo Corvette.
Fuente y Fotos: Red River Chevrolet
